Nelson Cruz: “Giara es la que me controla”

El jardinero y designado de Baltimore habla sobre su niña de dos años, que con solo decir “papi” lo tiene a sus pies 

Muchos lanzadores con físicos imponentes y lanzamientos de pura calidad no han podido con Nelson Cruz. Sin embargo, una pequeña de dos años lo tiene como el merengue aquel de los Hermanos Rosario “amarra’o y asfixiao”.

“Giara me controla”, dice Nelson en su entrevista para Círculo de Grandes Ligas que fue difundida anoche por CDN. “Ella es quien me levanta y a la hora que ella se duerme es que entonces me duermo. Giara controla todo. Ahora es un poco mejor porque ella se ha adaptado más a mi horario como pelotero, pero antes vivía trasnochado”, agrega.

Cruz es otro ejemplo de un atleta de calidad, temido por la oposición que le vio disparar 40 jonrones y remolcar 108 carreras con los Orioles de Baltimore en la pasada temporada, que se rinde ante los pies de sus hijos, en este caso el de una damita que le domina en todo el sentido de la palabra.

“Ella es mi debilidad”, señala Cruz con un rostro que cambió por completo a la hora de hablar de su niñita. “Mi primer hijo me dio la alegría de que uno como padre pues quiere que el primero sea varón”, comenta el nativo de Las Matas de Santa Cruz, Montecristi, al noroeste de la República Dominicana, sobre Nelson Jr. “Pero con Giara todo cambió. El hecho de que sea hembra, pues hace que uno sienta más las cosas que ellas hacen porque son más cariñosas. Uno debe querer a todos sus hijos iguales, pero con las hembras es diferente”, dice el jardinero y designado.

Giara tiene tanto poder que Nelson come con ella y cuando el patrullero está en la casa “solo se duerme con papi. Todo es con papi. Ella lo que dice es que ella es de papi”.

Padre completo

Nelson no es uno de esos padres que tienen el título, pero no ejercen ese oficio. Anótelo en el grupo de los que se ganan sus rayas al realizar cualquier labor. 

¿Tú cambias pañales? “Claro que los cambio. Hago todo lo que tenga que hacer.

La baño, la cambio…hay ocasiones en las que según ella la disfrazo porque no sé combinar una cosa con la otra”, responde entre risas el caballeroso jugador.

“Pero yo trato y creo que he ido mejorando”, dice Nelson, quien ha recibido mejores calificaciones de parte de su esposa. “Ya me dijo que estaba mejor la combinación”, añade.

Nelson, con raíces familiares muy apegadas a la disciplina y la educación, también sabe cocinar cualquier plato criollo. “Te hago un moro, un locrio, arroz blanco, lo que sea. Antes esa era mi rutina, llegaba del gimnasio de entrenar y me fajaba yo mismo”, recuenta el líder en cuadrangulares de las Grandes Ligas en la pasada vuelta regular. 

Aprendió por necesidad. Sus primeras sesiones fueron por teléfono y su madre la profesora que le impartió docencia.

Mientras tanto, la que tiene el timón en la casa es Giara, que con solo decir “papi” tiene a Nelson a sus pies.

Por Yancen Pujols