Philip Humber: “Sabes que tiras juego perfecto cuando no recuerdas a nadie en las bases”

El derecho es el primero que lanza impecable en la MLB, y tira en la pelota dominicana

SANTO DOMINGO. En casi un siglo de béisbol profesional, incluyendo 65 años de la Lidom, por los diamantes dominicanos han pasado más de una docena de inmortales de Cooperstown, ganadores de premios al Jugador Más Valioso y Cy Young. Pero fue el martes pasado en el Quisqueya que subió a un montículo un lanzador de juego perfecto en las Grandes Ligas.

Philip Humber, texano, miembro del Partido Republicano y cristiano que ha hecho misiones en Filipinas, se encuentra en la plantilla de los Gigantes del Cibao, buscando regresar al Big Show, “al menos que Dios tenga otros planes”.

El 21 de abril de 2012, vistiendo el uniforme de los White Sox de Chicago, apenas necesitó 96 lanzamientos para anular por completo a los Marineros de Seattle, y lograr el juego perfecto número 21 en la historia de las Grandes Ligas. En 139 años de Major League Baseball apenas se han tirado 23 partidos así.

Era su salida 30 en el máximo nivel de una accidentada carrera que comenzó con los Mets en 2004, y tenía de frente una alineación que incluía a Ichiro Suzuki, Chone Figgins, Kyle Seager y el dominicano Miguel Olivo.

El partido apenas duró dos horas y 17 minutos y a partir del séptimo capítulo sentía que la mayoría de los 22,472 aficionados en el Safeco Field estaban a su favor, lo que le disparó la adrenalina.

“¿Soy el primero?”, pregunta asombrado Humber a reporteros de DL cuando es abordado en el clubhouse del parque Julián Javier. “Me sorprende que una liga como ésta y de un país del que han salido tantos jugadores yo sea el primero. Bueno, es algo que no ocurre tan a menudo, pero no deja de llamarme la atención”, dice el derecho de 32 años, que lleva en su guante escrito Colosenses 3:23.

Fue su momento más dulce, y atribuye la mayor responsabilidad a su receptor y compañeros que hicieron las jugadas. Antes había llevado dos partidos sin hit hasta el séptimo.

Pero tras tocar el cielo, cayó al precipicio. Humber viene de una experiencia amarga en Corea del Sur en el verano, tras trabajar 50 entradas con efectividad de 6.75, los Kia Tigers lo despidieron en julio. Su hoja en Grandes Ligas incluye marca de 16-23, 5.31 de efectividad en ocho temporadas, que también incluyen Minnesota, Kansas City y Houston.

En su primer partido ante el Licey trabajó cuatro entradas en blanco de tres hits, dos ponches y una base. Ayer, ante los Toros, tiró 4.2 capítulos de cinco imparables, tres vueltas dos transferencias y dos ponches.

P. ¿Cuándo sabías que ibas perfecto?

R. Cuando no pude recordar a nadie en las bases, en el sexto. Pero en realidad nunca piensas qué puede pasar, cuando llegas al séptimo capítulo hay demasiada adrenalina, demasiadas emociones, los últimos dos inning sientes el estadio metido en el juego, la gente emocionada, es algo muy lindo, aunque tus compañeros no te lo comenten entre entradas, es díficil no darse cuenta.

P. ¿Cuánto pesaban los nervios?

R. No diría que nervioso, cuando llegas al séptimo lo que uno se siente es emocionado. Uno se puede poner nervioso porque algo malo puede ocurrir, pero nadie espera que lances un partido perfecto, si no ocurre, bueno, tienes la oportunidad de hacer algo bueno, la actitud que tuve fue de al menos tirar un no hitter, si se rompe el perfecto, que sería fantástico, busqué la zona de strike. Lo más importante es ganar el partido, afortunadamente llegamos al noveno ganando 4-0, que podía ser lo suficiente para ganar.

P. ¿Puedes describir el final del partido?

R. Estaba muy agradecido cuando cayó el out 27. Mi carrera ha tenido altas y bajas, como muchos peloteros, la mayoría no vamos de forma directa a las Grandes Ligas y para un tipo como yo poder lanzar un juego perfecto, vivir esa experiencia, me sentí demasiado agradecido con Dios. Al otro día, fueron cientos los mensajes de texto, las llamadas que tuve que atender. Pero pude dormir, fue un día en la tarde, me fui a la casa, descansé y al día siguiente había que estar temprano en el estadio, fue divertido, son cosas que nunca podré olvidar.

P. ¿En qué punto está tu carrera?

R. No lo sé. Mi meta ahora es conseguir otra oportunidad en la MLB, tengo 32 años, no soy joven, pero al mismo tiempo creo que me queda mucho, creo que en este momento tengo la madurez para salir a divertirme, y por eso vine a la República Dominicana. Dios tiene un plan, ya sea continuar en béisbol, quién sabe qué puede pasar.

Por Nathanael Pérez Neró 

NPerez@diariolibre.com

Juegos Perfectos en la MLB

Nombre Equipo Año

Lee Richmond Worcester Ruby Legs 1880

Monte Ward Providence Grays 1880

Cy Young Boston Pilgrims 1904

Addie Joss Cleveland Naps 1908

Charlie Robertson Chicago White Sox 1922

Don Larsen NY Yankees 1956

Jim Bunning Philadelphia Phillies 1964

Sandy Koufax Dodgers 1965

Catfish Hunter Oakland Athletics 1968

Len Barker Cleveland Indians 1981

Mike Witt California Angels 1984

Tom Browning Cincinnati Reds 1988

Dennis Martínez Montreal Expos 1991

Kenny Rogers Texas Rangers 1994 David Wells New York Yankees 1998

David Cone New York Yankees 1999

Randy Johnson Arizona Diamondbacks 2004

Mark Buehrle Chicago White Sox 2009 Dallas Braden Oakland Athletics 2010 Roy Halladay Philadelphia Phillies 2010

Philip Humber Chicago White Sox 2012 Matt Cain San Francisco Giants 2012 Felix Hernández Seattle Mariners 2012