El Quisqueyano Edinson Vólquez le rindió tributo a su padre con gran salida
NUEVA YORK -- Edison Vólquez estaba erguido en el medio del clubhouse de visitantes en el Citi Field, bañado en champaña. Usaba gafas para esquiar y hablaba a los micrófonos. Reía. Sonreía.
Vólquez era campeón de la Serie Mundial y disfrutaba el momento.
Era el Edinson Vólquez que todos han conocido a través de los años y al final del día, esa era la mejor forma para rendir tributo a su padre, quien murió antes que Vólquez abriese el Juego 1 de la Serie Mundial.
"Estaba tratando de no pensar en mi padre cuando estaba en la loma", dijo Vólquez. "Fue difícil hacer pero creo que lo conseguí. Comencé a pensar en él un poquito más cuando me sacaron del juego. Esperaba que la gente estuviese muy orgullosa de mí y creo que mi padre lo está".
Vólquez lanzó por espacio de seis entradas y contuvo a los Mets a sólo dos carreras en la victoria de los Reales por pizarra de 7-2 en extra innings. Su valerosa salida será uno de los momentos memorables de la carrera de Kansas City por el campeonato.
"No estaba tratando de apurarme. Quería mantenerme en control del juego", dijo Vólquez. "Sólo hicieron dos carreras en mi contra. (Matt) Harvey lanzó un gran partido y pudimos anotar en contra de él".
Vólquez toleró un jonrón a Curtis Granderson para empezar el partido y se escapó de un problema con las bases llenas en el sexto, al admitir sólo una anotación. Hizo lo suficiente para darle a su equipo la oportunidad de ganar. Otorgó cinco boletos y ponchó a igual número de bateadores.
"Traté de mantenerme en control y no perder la calma. No fue fácil, pero pude salir bien", dijo Vólquez. "Este es el momento más grande de mi carrera. Se lo dedico a mi padre, a mi madre y todos en mi familia que me quieren. Esto es para ellos. Sentí como si mi padre estuviese conmigo en ese inning. Bases llenas sin outs. Siento que él me ayudó ahí".
Además, el hizo algo que ningún otro lanzador de los Reales ha hecho en una Serie Mundial: batear un hit. Vólquez disparó un sencillo en el tercer inning.
"Le dije (al coach de pitcheo) Dave Eiland que soy uno de los mejores bateadores en el equipo y me dijo, 'vamos a ver que tienes'", dijo Vólquez. "Conecté un hit y me dijo, 'Hey, ahora sé que eres uno de los mejores bateadores en el equipo'".
Eiland no podía estar más orgulloso de Volquez.
"Uno siente luto por él y su familia pero a la vez estamos felices por él", dijo Eiland. "Espero que esto le dé algo de felicidad en un momento tan difícil. Sé que es un tipo fuerte. Me mostró cuán fuerte fue esta noche".
Eiland tuvo razón. Vólquez fue fuerte. El pitcher dice que no estuvo solo en la loma.
"Al salir del dugout para calentar antes que comenzara el partido, caminé hacia el bullpen y sentí que mi padre estaba detrás de mí", dijo. "Me acompañó esta noche".
Por Jesse Sánchez / MLB.com
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