A Tiro de Hit: Los Yankees se mejoran sin grandes inversiones

La adquisición de Aroldis Chapman por el equipo de los Yankees de New York ha traído toda suerte de comentarios, y eso era de esperarse. El zurdo cubano de poderoso brazo está involucrado en un aparentemente serio caso de violencia doméstica cuya investigación aún no ha terminado y que podría traer consigo una suspensión importante en su contra.

Muchos han cuestionado el movimiento de la cuidadosa organización, por involucrar un jugador cuyo carácter se encuentra en entredicho. Sin embargo, desde un punto de vista deportivo los Yankees se han mejorado sin hacer cuantiosas inversiones en la agencia libre.

La nómina de la organización del Bronx tiene el peso de los enormes contratos con jugadores como Alex Rodríguez, Mark Teixeira y CC Sabathia, entre otros. El acuerdo de “Tex” termina luego de la temporada 2016 (junto al de Carlos Beltrán), el de ARod luego de 2017 y el de CC vence luego de la próxima temporada pero contiene una opción para 2017 que podría activarse si el zurdo se mantiene saludable.

Esos pactos se unen a otros más recientes con Masahiro Tanaka, Jacoby Ellsbury, Brian McCann y otros para sumar un significativo compromiso. Ustedes dirán que los bolsillos de los Yankees no tienen fondo, pero la oficina del equipo desea manejarse dentro de unos parámetros de nómina más conservadores que han dejado al gerente Brian Cashman con menos poca flexibilidad. Mejorar el equipo sin ceder el mejor material joven de la organización lucía tarea difícil, pero Cashman lo ha logrado. Primero aseguró los servicios del talentoso infielder dominicano Starlin Castro (25 años), quien será el intermedista titular del conjunto, y ahora ha conseguido los servicios de Chapman por cuatro jugadores de liga menor.

El principal riesgo aquí es el tiempo de suspensión que reciba el cubano. Si los Yankees pueden tenerlo por la mayor parte de la próxima estación, el bullpen podría ser históricamente formidable. Si la pena es más larga, el equipo tendría el aliciente de que el cubano no acumularía suficiente tiempo de servicio para ir a la agencia libre luego de la temporada y sería controlable hasta después de 2017.

Rotación llena de dudas

Ahora, sobre el razonamiento de la negociación. Los Yankees no han logrado fortalecer su rotación de abridores, la cual presenta una interrogante tras otra. Masahiro Tanaka tiene una lesión en su codo que lo convierte en bomba de tiempo, Sabathia no lanza de manera consistentemente efectiva desde 2012, y podemos decir que las altas y bajas han sido la principal característica de Michael Pineda, Iván Nova y Nathan Eovaldi. Luis Severino tiene las herramientas para ser el as de la rotación, pero 2016 será su primera temporada completa en las Mayores.

Viendo a lanzadores como David Price, Zack Greinke y Johnny Cueto ir a otros equipos, el gerente de los Yankees tomó una página del libro utilizado por los Reales de Kansas City el año pasado: Si no contamos con pitcheo abridor dominante, compensemos fortaleciendo el bullpen.

La rotación de los Reales terminó en el lugar número 22 en efectividad en las Grandes Ligas y en el peldaño 24 en entradas lanzadas. Sin embargo, fueron ellos quienes levantaron el trofeo de campeones de la Serie Mundial

el pasado 1 de Noviembre. Una de las principales razones fue un casi intocable cuerpo de relevistas que tuvo el segundo mejor PCL en todo el béisbol y el mejor promedio de bateo de la oposición.

El modelo que intentarán los Yankees es similar. Pendiente a otras posibles negociaciones, la presencia de Chapman acortará los juegos y quitará presión a la preocupante rotación. El cubano pasará a ser el cerrador, en un escenario donde ya Andrew Miller aceptó encargarse del octavo inning luego de salvar 36 partidos como el stopper del equipo en 2015 y el dominicano Dellin Betances asumirá el séptimo capítulo.

Aunque la profundidad del bullpen es una preocupación luego de los cambios que enviaron a Adam Warren y Justin Wilson a otros equipos, ese trío deberá ser devastador. En 2015, Chapman ponchó 15.7 bateadores por cada nueve entradas, Miller 14.6 y Betances 14.0 pasados por las armas por cada nueve capítulos. Fueron los tres mejores del béisbol en esa estadística y ahora podrían estar juntos en el mismo bullpen. Siempre existe la posibilidad de que el cubano o Miller sean cambiados por un lanzador abridor joven, pero hasta ahora el plan parece ser contar con el trío de ensueño.

Material joven intacto

Un factor importante en las negociaciones de la “off-season” es que los Yankees mantienen en su roster a los prospectos Severino, Aaron Judge (jardinero), Jorge Mateo (torpedero) y Gary Sánchez (cátcher), la crema y nata de su sistema de fincas. Los últimos dos son dominicanos, y Sánchez está proyectado para ser el segundo receptor del equipo en 2016.

Con ese material, el conjunto se proyecta como contendor mientras compran tiempo hasta que los mega contratos comiencen a caducar. Ya veremos lo que ocurre en la próxima estación.

Por Kevin Cabral / Tomada de su columna a "Tiro de Hit" del Listin Diario