El Juego de Estrellas más especial para venezolano Miguel Cabrera

SAN DIEGO -- Por varias razones, el undécimo de su carrera es el Juego de Estrellas más especial en la legendaria carrera del gran toletero venezolano Miguel Cabrera .

''Dicen que nunca se olvida el primero, pero estoy seguro que nunca olvidaré este último'', dijo Cabrera a ESPN Digital durante las prácticas de la Liga Americana, el lunes, en el Petco Park de San Diego.

''Este no ha sido uno de mis mejores años, vengo de faltar al Juego de Estrellas del año pasado y además, este es el último de David Ortiz . No me lo quería perder'', dijo el inicialista de Tigres de Detroit .

Cabrera, quien ganó el título de bateo en cuatro de las anteriores cinco temporadas y logró una triple corona de bateadores y dos premios de Jugador Más Valioso en ese tramo, fue convocado al clásico de mitad de temporada por séptimo año consecutivo y undécima ocasión en su carrera de 14 temporadas.

Cabrera, el pelotero activo con más selecciones al Juego de Estrellas, no pudo participar en las festividades del año pasado en el Great American Ball Park de Cincinnati debido a una lesión y parecía que no haría el equipo del joven circuito este año, tras batear .206 con un jonrón en los primeros 17 juegos de la temporada.

Sin embargo, Cabrera prendió los motores disparando dos vuelacercas el 25 de abril y 15 más en los próximos 70 juegos para concluir el ecuador de la temporada bateando .293 con 18 jonrones y 53 impulsadas, cifras por debajo del excelso ''Nivel Cabrera'' --promedia .320 con 34 jonrones, 41 dobles y 102 anotadas por cada 162 partidos en su carrera--, pero buenas para los jugadores normales.

Cuando Eric Hosmer , de Reales de Kansas City , ganó el voto de los aficionados para abrir en la primera base, los colegas de Cabrera no titubearon en escogerlo como sustituto en el roster de la Liga Americana. Un reconocimiento que recordó a muchos el lugar que ocupa el venezolano en la jerarquía del juego.

''Aunque no juego para eso, para lo que diga la gente'', dijo Cabrera, quien ha pegado 2,429 hits (incluyendo 508 dobles y 426 jonrones) a los 33 años de edad y para muchos ya tiene méritos para entrar al Salón de la Fama del béisbol si no jugara un partido más el resto de su vida.

''Si me va bien, la gente hablará bien, si me va mal, hablarán mal. En realidad, ese tipo de comentarios uno lo aprende a bloquear. Uno aprende a vivir el día a día, de las cosas positivas que pueda hacer en el terreno'', agregó.

Cabrera fue llamado al Juego de Estrellas por primera vez en su segunda temporada con Marlins de Florida , en el 2004, cuando tenía 22 años de edad. Es el primer jugador ofensivo de los Tigres con siete selecciones seguidas desde que Bill Freehan acudió a 10 al hilo entre 1964-73.

''Me siento bendecido de estar en San Diego. Por muchas cosas, este es muy especial'', dijo Cabrera.

''No quería perderme el último Juego de Estrellas de Big Papi, quien debería reconsiderar retirarse con todos los palos que ha dado este año'', dijo Cabrera. 'Estuve en el último de Mariano Rivera , de Chipper Jones y de Derek Jeter . No podía perderme el de Ortiz'', agregó.

Por Enrique Rojas, ESPN Digital