#NBA: Golden State Warriors no es para tanto

Antes de nada, sobre todo antes de tener que subir la guardia ante una avalancha de golpes, dejen que me explique. Golden State Warriors es un gran equipo, con una gran plantilla y con muy buenos resultados. El conjunto de la bahía de Oakland lidera la Conferencia Oeste con un récord de 23-4, que le sirve también para estar a la cabeza en la clasificación general de la NBA. Además es el equipo con el promedio más alto de puntos anotados por partido (117.3) y el que atesora una diferencia media más abultada (11.8). Pero de todos modos, y con todo el dolor de mi corazón, debo decir no es para tanto. No al menos en comparación con las expectativas que había puestas sobre los chicos dirigidos por Steve Kerr desde el banquillo, con un tridente estelar formado por Stephen Curry, Kevin Durant y Klay Thompson y ‘secundarios’ de lujo como Draymond Green, Andre Iguodala o Zaza Pachulia. Llámenme exigente si quieres, pero de verdad que personalmente esperaba bastante más de todos ellos como conjunto, aunque muchos se den más que por satisfechos con los números y la contundencia de algunas de sus victorias.

Todo el hype que rodeó a la llegada de Kevin Durant a Golden State Warriors convertía a los campeones hace dos temporadas y subcampeones la campaña pasada en poco menos que los Monstars de Space Jam. Parecía que los de Oakland iban a arrasar en todos sus partidos como lo han hecho en algunos de ellos. Había miedo por si resultaba un fiasco que tres anotadores compulsivos como Curry, Thompson y KD tuviesen que compartir un sólo balón y afortunadamente no fue así, pero el problema es que quizás muchos esperásemos que precisamente cada uno jugase con el suyo el el castigo al aro contrario se multiplicase por tres. Puedo pecar de incrédulo, pero mi imaginación dibujaba a grandes rivales, individuales y colectivas, humilladas a los pies de este proclamado súper equipo y no sólo derrotados con mayor o menor solvencia. Esperaba una apisonadora de esas amarillas que deja todo plano a su paso, y me he encontrado una máquina perfectamente engranada y devastadora, que sin embargo no parece tan letal e infalible, y que no sé yo si en los Playoffs 2017 mostrará una versión demoledora o será tuteada, hasta el punto de recordar a aquel conjunto del récord de victorias en una sola temporada que luego dejó escapar una renta de 3-1 en las Finales.

Insisto, que sólo es un pequeño chasco personal, que me recuerda a la película El Bosque, con un trailer que ponía los pelos de punta pero en el que aparecían los dos únicos sustos de lo que luego era un thriller espectacular menospreciado por unas expectativas superiores a la realidad.

Fuente: Basket4us.com