Clásico: Dominicana viene a repartir más ‘plátanos

El dirigente de los dominicanos, Tony Peña, conversó con Primera Hora sobre la confección del equipo y el objetivo de defender el campeonato.

Con la fanaticada con plátanos en las gradas y con un talento de primer nivel en el diamante, República Dominicana arrasó en la última edición del Clásico Mundial de Béisbol al terminar la competencia de manera invicta.

En el 2013, Dominicana cerró el torneo con marca de 8-0 para convertirse en el primer equipo del Clásico en ganar el mismo sin derrotas.

Cuatro años después, Dominicana saldrá al terreno con la misión de defender el campeonato. Los quisqueyanos pertenecen al Grupo C y jugarán en el Marlins Park con Estados Unidos, Canadá y Colombia.

Con las adiciones de Manny Machado y Dellin Betances junto a Robinson Canó, Nelson Cruz, José Reyes y José Bautista, Dominicana luce nuevamente como el favorito para alzar el trofeo de campeón.

Tony Peña repetirá al frente del conjunto y luce entusiasmado con la oportunidad de repetir el campeonato. Su única preocupación son las lesiones en jugadores claves como Adrián Beltré y Hanley Ramírez, y la situación de Jonny Cueto.

Primera Hora tuvo la oportunidad de conversar en exclusiva con el también coach de los Yankees de Nueva York desde Tampa Bay.

¿Cómo está su ánimo y el de su equipo a una semana del Clásico?

Todo el mundo está animado porque siempre hemos dicho que cuando tienes la oportunidad de salir a representar a tu patria, es lo más grande que puede existir en el mundo. Sabemos todos que vamos a morir, pero sí dejamos un recuerdo. Los beisbolistas vivimos del recuerdo, y cada vez que podemos hacer algo por la patria se siente muy bien. 

Aún con las dudas y posibles bajas con Beltré y Cueto, el equipo se ve muy potente. ¿Será difícil dejar fuera a jugadores de este calibre, aunque el material parece sobrar? 

No es fácil hacer un equipo cuando tienes tanto talento, y gracias a Dios nuestro país tiene mucho talento. Hemos tenido unas bajas, la de Cueto que no sabemos de él todavía, la del Beltré y hoy (martes) me acabo de enterar de Hanley Ramírez que tiene un hombro lastimado y está día a día, y así sucesivamente. En el papel tenemos un gran equipo de pelota.

No siempre el mejor equipo en el papel gana; es el equipo que esté más acoplado. Y espero que cada uno de los muchachos de los que han dicho presente estén en su mayor capacidad física, porque el Clásico está hecho en una época en que todos los jugadores no están en una óptima condición.

Pero estoy contento de todo el respaldo que nos han dado todos nuestros muchachos.

¿Las lesiones y las posibles bajas no han afectado la química o la unión del equipo?

La unión del equipo la haces cuando todos estén juntos. Puedes tener unión a través de una línea telefónica, pero tienes que llegar y tratar de ver cómo juntas todos esos muchachos.

¿Cueto está de baja oficialmente?

Fíjate, todavía no lo hemos descartado, porque es muy difícil sustituir un lanzador como Cueto. La idea es buscar quién esté disponible para hacerlo.

Hay muchos muchachos que no pueden participar por equis razón, y entonces habría que ver con quién podríamos sustituirlo si no puede ir, como tampoco hemos descartado a Beltré.

No hemos descartado a ninguno de nuestros jugadores todavía. Descartaremos a nuestros jugadores cuando tengamos una mejor idea el próximo 4 de marzo, que nos reuniremos para saber dónde estamos.

¿Cuando confeccionaron el equipo lo hicieron pensando en ganar otro campeonato de manera invicta?

(Ríe) Eso es muy difícil de lograr. Tu sabes que nunca pienso en el pasado. Y ya eso pasó. Ese 8-0 quedó atrás. Ahora pienso en el presente, pero tampoco puedo ir pensando en qué va a pasar. Lo único que yo te puedo asegurar es que en el béisbol no hay enemigo pequeño. Todos los equipos son iguales.

Tú tienes que jugar el juego de la misma forma que juegas contra Estados Unidos, contra Puerto Rico, contra Venezuela, contra todos los países que tienen tremendos equipos. México, que tiene uno muy bueno, Holanda, Japón, Corea… pero con los equipos que no tienen muchos jugadores conocidos uno tiende a echar para atrás, y es ahí cuando tienes que jugar más fuerte.

Por eso es que es muy difícil, y nadie puede ver el futuro. Pero sí… hemos preparado un equipo para ir a una guerra, y esa guerra la vamos a ir ganando batalla por batalla.

¿Tiene alguna idea de la alineación que presentará? 

(Vuelve a reír) No, todavía no hemos trabajado en la alineación. Todos son buenos jugadores. No creo que a ninguno le importaría en que parte de la alineación lo ponga siempre y cuando estén jugando. 

¿Ha encontrado algún punto débil en el equipo?

Lo únicos que quisiera mejorar son las bajas que hemos tenido. Aunque no hemos descartado esos jugadores, si no pueden jugar tenemos que buscar jugadores que sean de ese calibre y que estén disponibles.

¿Entiendes que están sólidos ofensivamente?

Creo que tenemos una buena combinación. Pero me parece que tenemos un buen pitcheo de relevo. Nuestro bullpen es bueno.

¿Aparte de que tiene brazos abridores como Edinson Vólquez, Carlos Martínez y Cueto?

Tenemos mucho pitcheo de fuerza en cuanto al bullpen se refiere. Uno puede pensar en los abridores, pero hay que recordar que el pitcheo abridor puede hacer solo 65 pitcheos en la primera ronda. Y tienes que disponer de un largo bullpen para poder terminar el juego. Y eso es lo que hemos hecho: tratar de buscar brazos que nos puedan ayudar en eso.

¿Que representaría para usted y para República Dominicana repetir el cetro?

Vivo el día a día. Tus deseos los guardas dentro de ti, porque cuando tú quieres, tú puedes. Pero no puedes predecir qué puede pasar. Todo el mundo sabe cuál es el deseo, pero lograrlo no es tan fácil. 

En su larga carrera como pelotero, como jugador, como coach y como dirigente usted ha tenido muchos momentos de gloria.

¿Dónde ubica el título del Clásico entre sus logros? 

Un jugador tiene muchos momentos inolvidables. El primer hit, el primer jonrón, tu primer Juego de Estrellas, tu primer Guante de Oro y eso es sin ir a la Serie Mundial. Pero definitivamente, el 2013 tiene que ser uno de los mejores momentos de mi carrera. 

Por Joel Ortiz Rivera

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